Carolina Herrera: El 27 de septiembre del 81 fue la primera vez que yo mostré una colección en el Metropolitan Club. Así que tengo todo este 2007 para festejarlo de alguna manera.
V.: Ideas no le deben faltar...
C.H.: Desde luego que no. Tal vez haga una colección de color plata para festejar mis bodas de plata... Ya veré, todavía hay tiempo para pensarlo. Si Jean Paul Gaultier celebró sus 30 años con todo tipo de actividades en Nueva Yokr, como la exposición en Begdorf Goodman, yo también quiero hacer algo en mi aniversario.
V.: ¿Le gusta más diseñar para verano o para invierno?
C.H.: Yo amo la feminidad sin estridencias, con un estilo elegante que hace hincapié en los detalles importantes que ensalzan una prenda. Me dan igual las temporadas.
V.: En su desfile para este verano parece que había más prendas de calle que de noche...
C.H.: Pudiera parecerlo porque lo presenté de modo diferente, intercalando vestidos de noche entre las prendas de día. Hice una presentación salteada sin el rigor del orden con que se suelen hacer los desfiles.
V.: ¿Estamos viendo una Carolina Herrera más moderna?
C.H.: Yo quiero ser actual. Mi inspiración ha sido la mujer independiente y sofisticada que se ve chic, pero como si no hiciera gran esfuerzo por prepararse. No quería hacer uno de esos vestidos de los que he hecho tantas veces, que parecen de baile, encorsetados y apretados, con los que la mujer tiene poca movilidad.
V.: ¿Por qué siempre se declaró enemiga del vaquero?
C.H.: Nos cansamos de ver a la mujer con un vaquero y unos zapatos a juego con el bolso para la noche. Queremos algo más, porque el tejano es una especie de uniforme que le queda bien a mucha gente joven, pero ya a ciertas edades no sienta bien. El cuerpo ya no es igual que antes, todo tiene su oportunidad.
Fuente:Vogue.es.
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